Descripción

Huevas de merluza de pincho, en conserva.

Es una conserva artesana que requiere seguir el procedimiento tradicional para obtener la mejor calidad.

Para ello se extraen las huevas de la merluza y se limpian.

Posteriormente hay que cocer las huevas.

Se cuecen para poder cortarlas en rodajas y colocarlas manualmente en las latas.

Se cubren de aceite de oliva y el toque final se le da al añadirle media rodaja de limón.

Conseguimos así unas suaves y deliciosas huevas de merluza.

Tienen además un toque cítrico, que las convierten en todo un manjar.

La merluza de pincho se denomina así por el tipo de arte empleado para su pesca, el pincho.

El pincho es un sedal con numerosos anzuelos, donde las merluzas se van quedando enganchadas.

El hecho de pescarla con pincho determina el sabor y la calidad de este pescado.

Las merluzas de este modo no sufren golpes ni magulladuras como al emplear otro método de pesca.

Es por ello que su calidad es mucho mayor, e incluso aguantan frescas más tiempo.

De la merluza de pincho se aprovecha todo, y sus huevas, son todo un manjar.

En este modo de consumirla, en conserva, se consigue potenciar todavía más su sabor.

Huevas de merluza de pincho es una conserva poco común, pero es uno de los grandes manjares dentro de una lata.

Podrás degustarlas solas, en canapés, o añadirlas a cualquier plato de pescado o marisco, como a ensaladilla rusa, e salpicón, a cremas de marisco, o cualquier plato que se te ocurra.

Es la conserva perfecta para tomar en el aperitivo, acompañada de vermut o de un vino blanco bien frío.

En este caso, recomendamos maridarlas con uno de nuestros vinos albariño de las Rías Baixas.

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