Orujo blanco gallego- aguardiente

32,00 IVA incluído

Orujo de aguardiente blanca procedente de Galicia, elaborado de manera tradicional, y listo para tomar solo en chupito o acompañando un café en la sobremesa.

A partir del orujo blanco se pueden elaborar otro tipo de orujos.

Formato en garrafa de 3 litros.

Descripción

Aguardiente de orujo blanco enbotellado en garrafas de tres litros.

El orujo es un aguardiente obtenido por destilación de orujos de uva, es decir las partes sólidas de la vendimia que no tienen aprovechamiento en la previa elaboración del vino, perteneciendo al mismo tipo de bebida que los marc franceses, las grappas italianas, las bagaçeiras portuguesas o los tsiroupos griegos.

Con la destilación de orujos no se pretende una simple extracción de alcohol, sino mas bien una extracción fina y selectiva de los componentes aromáticos contenidos en los orujos, mediante la concentración del alcohol casi 20 veces, y con el adecuado manejo de cabezas y colas, para obtener una bebida placentera para los sentidos, respetuosa con una tradición y una cultura, y que defina en sus características organolépticas la personalidad diferenciada de la materia prima de la que procede.

La técnica y el arte de la destilación consisten en regular el aporte externo de energía (calor), para conseguir un ritmo de destilación lento y constante, que permita la aparición de los componentes aromáticos deseados en los momentos adecuados.

El proceso de destilación se desarrolla en dos fases : la primera es la vaporización de los elementos volátiles de los orujos ; la segunda es la condensación de los vapores producidos.

Las destacadas bondades y características de una buen destilado de los orujos de uva dependen de muchos factores. De la misma variedad y calidad de uva, la modalidad familiar empleada en la extracción del mosto, la fermentación del mismo, el tiempo de conservación de los orujos hasta que se utilizan en el alambique y la composición de mismo.

Los orujos se suelen consumir en vasos pequeños o de chupito, siendo el mejor momento del día para hacerlo la sobremesa o en la toma de un café. En la antigüedad, era costumbre de los campesinos tomar orujos caseros de hierbas tras el desayuno y antes de iniciar los duros trabajos en el campo. Actualmente es de consumo generalizado tras las comidas, como apuntábamos, sobre todo gracias a sus propiedades digestivas.