Descripción
Una vez lavada en salmuera templada y meticulosamente limpiada, se somete a un baño de vapor con el objeto de que adquiera la dureza apropiada y no rompa. A continuación, se dejan enfriar y se colocan manualmente en la lata. Para conservar de la mejor manera su sabor y textura se utiliza como líquido de cobertura un aceite de oliva de la mejor calidad.